Agosto se enfría: el mercado inmobiliario español muestra signos de desaceleración
El mes de agosto de 2025 ha cerrado con una caída en las ventas de vivienda en España, confirmando una tendencia de enfriamiento que ya se venía observando desde mediados de año.
Según el Consejo General del Notariado, las compraventas bajaron un 1,3 % interanual, mientras que los registradores apuntan a un descenso del 3,5 %. Aunque los datos puedan parecer moderados, marcan un cambio de ritmo en un mercado que llevaba meses manteniendo niveles de actividad muy altos.
En Alicante y la Costa Blanca, donde tradicionalmente el mercado inmobiliario se mantiene más activo durante el verano por el tirón del turismo residencial, también se ha percibido un ligero descenso de operaciones y un aumento de propietarios que deciden esperar al otoño para poner su vivienda en venta.
🔍 ¿Por qué se están frenando las ventas?
Varios factores explican este enfriamiento:
- Escasez de oferta adecuada: hay compradores interesados, pero la falta de vivienda disponible en buen estado o a precio ajustado está limitando operaciones.
- Precios todavía elevados: el valor medio de la vivienda sigue en niveles altos, lo que frena a muchos compradores, especialmente a los nacionales.
- Menor demanda internacional: la reducción de compradores extranjeros —por el contexto económico global y el tipo de cambio— también afecta a zonas costeras como Alicante.
- Factores estacionales: agosto siempre ha sido un mes más tranquilo en transacciones, pero este año la bajada ha sido más marcada.
- Mayor prudencia ante la incertidumbre económica: las noticias sobre inflación, subida de precios o menor crecimiento generan un efecto psicológico de espera.
🏖️ Alicante: un mercado que resiste, pero con señales de ajuste
En la provincia de Alicante, las compraventas han mostrado una leve corrección, especialmente en vivienda usada. Sin embargo, el interés internacional —sobre todo de compradores del norte de Europa— continúa siendo un pilar clave.
Las zonas con mayor actividad siguen siendo Alicante ciudad, San Juan, Gran Alacant, Santa Pola y los municipios costeros del sur, aunque se percibe un aumento en el tiempo medio de venta: si hace unos meses una vivienda bien ubicada podía venderse en 30–45 días, ahora el plazo medio se acerca a los 60–75 días.
Este dato no debe interpretarse como una alarma, sino como una normalización tras años de alta demanda y poca oferta. El mercado se ajusta, pero sigue sólido.
💡 Qué pueden hacer los propietarios
En un contexto de mercado más competitivo, la diferencia la marcan la estrategia y la presentación.
Algunas recomendaciones clave:
- Ajustar el precio de salida según el valor real de mercado, no el emocional.
- Mejorar la presentación del inmueble con home staging o pequeñas mejoras.
- Contar con un plan de marketing profesional, con fotografías de calidad, presencia digital y difusión segmentada.
- Evitar la sobreexposición: no publicar el mismo inmueble en exceso o con precios distintos.
- Confiar en un agente local que conozca la zona y el comportamiento de los compradores en Alicante.
📈 Mirando hacia el último trimestre del año
Todo apunta a que el mercado tenderá a estabilizarse en otoño, con un repunte habitual en los meses de septiembre a noviembre.
La clave estará en cómo evolucione la economía y en si la oferta se amplía lo suficiente para absorber la demanda contenida.
Alicante, por su atractivo residencial y turístico, seguirá siendo uno de los motores del mercado inmobiliario nacional, pero los propietarios que se adapten antes a este nuevo ritmo venderán en mejores condiciones.
📞 Conclusión y llamada a la acción
La caída de ventas en agosto no significa un parón, sino un ajuste natural tras varios años de crecimiento.
Si estás pensando en vender tu vivienda en Alicante o alrededores, este es un buen momento para preparar la estrategia, analizar el precio y salir al mercado con una propuesta sólida.
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